Filadelfia y Chicago son dos de las ciudades donde últimamente el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha incrementado la presencia de sus agentes en las últimas semanas.
Activistas han reportado un aumento en el número de agentes en las comunidades de Illinois con alta residencia de latinos, incluida la zona metropolitana de Chicago.
Esto ha provocado que las redadas en los condados del estado deriven en la detención de un mayor número de personas sin récord criminal.
Durante 2017, en Illinois aumentaron en un 22% las detenciones de inmigrantes y los operativos, según un reporte del Pew Research Center.
En tanto, un análisis de NPR reveló que en Chicago hubo un aumento del 73% en las detenciones de inmigrantes sin récord criminal y en más 129% las deportaciones.
Otra de las ciudades asoladas por ICE es Filadelfia, donde en los últimos días la migra detuvo a 49 inmigrantes.
En total, 17 de los detenidos tenían condenas penales; 14 tienen cargos penales pendientes; 6 habían sido expulsados previamente de los Estados Unidos; 14 eran fugitivos de inmigración con órdenes de remoción pendientes emitidas por un juez federal; 14 de las personas arrestadas habían sido liberadas de la custodia del condado de Filadelfia, a pesar de tener una detención de ICE presentada contra ellos.
Durante el año fiscal 2017 (que va de octubre a septiembre), la ciudad de Pensilvania vio un aumentó de las detenciones de inmigrantes sin récord criminal del 323%. Casi a la par, el Pew Research Center informó que el incremento general de detenciones fue de 53% en esa misma región.
Con información de La Opinión
