Fundación Jurídica del Migrante (FUJUMI) es una organización dedicada a defraudar a las personas en Guanajuato y Michoacán, su modus operandi consiste en ofrecerles visas de trabajo en Estados Unidos a cambio de un pago superior a los 10 mil pesos.
De acuerdo con el testimonio recabado por Conexión Migrante de personas afectadas por esta organización y su titular, María de los Ángeles Luz Anguiano, la FUJUMI cobró alrededor de 13 mil pesos en 20 comunidades de Guanajuato para llevarlos a trabajar al extranjero.
Fue en 2017 cuando la FUJUMI realizó estos cobros a unas 900 personas en varios pueblos de Guanajuato, relataron los afectados, sin embargo, a más de un año de haber realizado los depósitos bancarios continúan sin obtener respuestas sobre el trabajo o su dinero.
Desde abril o marzo de 2017, Luz Anguiano y su personal dejaron de responder las llamadas telefónicas a las personas afectadas.
Incluso, esta mujer amenazó con demandar a los defraudados por difamación y continúa insistiendo que todo esto es legal.
Más víctimas en Michoacán
A pesar de haber cientos de afectados en Guanajuato, existen muchas otros cientos de personas afectadas en Michoacán, lugar donde están las oficinas de la FUJUMI.
“Lucran con la necesidad de la gente que quiere conseguir el sueño americano”, expresó Guillermo Valencia, exalcalde de Tepalcatepec, Michoacán, quien se encargó de recolectar el testimonio de varias personas defraudadas por esta organización.
Igual que en Guanajuato, piden un depósito y posteriormente hacen más cobros, sin embargo, las visitas a la embajada nunca llegan.
Múltiples quejas de FUJUMI
A pesar de las múltiples quejas, FUJUMI continúa operando y asegura que han llevado a miles de personas a Estados Unidos. La realidad se refleja en algunos comentarios realizados en redes sociales, ya que aseguran que los “beneficiarios” son familiares de los organizadores.
Estas organizaciones se aprovechan de la falta de información y jamás explican en qué consiste el proceso del trámite de visas.
Realizan contratos falsos, llevan a los interesados a tramitar sus pasaportes y cobran por viajes en avión (antes de tener una cita en la embajada). No les dicen que para obtener la visa deben ir a una entrevista con autoridades consulares, las cuales deciden si se aprueba el permiso.
