Últimamente hemos escuchado profusamente que México, Estados Unidos y Canadá iniciaron la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) que tienen en vigor desde 1994.
Quizás el tema te parezca complejo o distante, pero la realidad es que te importa más de lo que te imaginas por dos razones:
- 1) Este tratado renovado estará estrechamente ligado a tu vida laboral.
- 2) Durante la fase de discusiones, el tema migratorio podría ser una de las principales armas de México frente a EEUU y Canadá.
¿Quieres saber en qué consiste este acuerdo y cómo te impacta?
Conexión Migrante te lo explica un artículo que publicaremos en dos entregas:
¿Qué es el TLCAN?
El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) es un acuerdo negociado por México, EEUU y Canadá a principios de los 90. Y que entró en vigor el 1 de enero de 1994.
Su meta era eliminar los obstáculos que enfrentaba el comercio entre los tres países para multiplicar el número de negocios comunes, el crecimiento de las economías y para generar más empleo.
Para lograrlo, los tres gobiernos aceptaron ir reduciendo (hasta su completa desaparición) el cobro de aranceles, es decir, de los impuestos que pagan los productos cuando cruzan una frontera para ser vendidos en otro país.
¿Cuál era su alcance?
El TLCAN es importante porque comprende un mercado muy jugoso. La población de México, EEUU y Canadá sumada supera los 400 millones de personas (por lo tanto, clientes potenciales).
Y esto, en la teoría, beneficiaba a muchos sectores. Un ejemplo, México es un gran productor de aguacate, el TLCAN le permitía vender su producto también en los países del norte a precios competitivos y no solo en territorio mexicano.
¿Qué sectores incluyó el TLCAN?
EL TLCAN es un documento muy amplio, incluye 22 capítulos. Sin entrar en los detalles, te diremos que en términos generales incluyó el comercio de textiles y ropa; e intercambios en los sectores automotriz, energético, de petroquímica básica, agricultura, medidas sanitarias, inversión, comercio de servicios, telecomunicaciones y sector financiero.
¿Se cumplieron los objetivos para México?
Algunos sí. Hubo resultados positivos.
Antes del TLCAN, las exportaciones totales de México (de todo tipo de productos) sumaban unos 47 mil millones de dólares. Hoy son casi 8 veces mayores.
Es un salto importante.
Uno de los principales sectores ganadores fue el automotriz. Antes del TLCAN había unas 13 plantas automotrices. Hoy hay más de 35. Esto se tradujo en muchos más empleos, en la fabricación de automóviles, de autopartes, llantas, equipos de sonido, etc. Un efecto en cascada.
¿Hubo fracasos en el TLCAN?
Sí, sin duda. Aunque México se consolidó como una potencia exportadora, esto sirve de poco si no se traduce en crecimiento general y bienestar para la gente. La realidad es que la economía creció en promedio un pobre 2.4% cada año durante los primeros 22 años del TLCAN (se esperaba 5% como mínimo) y la riqueza por habitante (PIB per cápita) se mantuvo casi sin cambios. Sectores como el textil o el juguetero se debitaron ante la competencia que imprimieron los vecinos.
Pero en general podríamos decir que las empresas ganaron. Los trabajadores, no.
Y éste último punto es particularmente importante porque durante la negociación del TLCAN, el gobierno de México nos vendió la idea de que con este acuerdo la economía crecería más, habría más empleos y se reduciría la migración de México hacia EEUU.
Esto último jamás sucedió, como tú lo sabes bien si nos lees del otro lado del Río Bravo. Pero de eso hablaremos con detalle la próxima semana, en la segunda entrega de este artículo. Mantente pendiente.
