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Una humillación más

Una humillación más: Trump le dice a Peña que mejor se cancela reunión si México no pagará el muro… ¿Y si hubiese sido al revés? El Presidente de México cancela la reunión con Trump como protesta por la firma de las últimas ordenes ejecutivas xenófobas y anti mexicanas? Presidente Peña actúa como si fuese neutral y decenas de millones de pesos le cuesta a México la oficina de asesores de la Presidencia de la República. ¿Que hace esta gente, que lleva de la mano al Presidente, de error en error?


EL MENSAJE VACÍO DE PEÑA NIETO

Anoche después de escuchar al Presidente Peña -al cual vi muy desmejorado en su salud-, en su mensaje nacional, sobre las órdenes ejecutivas xenófobas y anti mexicanas, del Presidente de los Estados Unidos, debo decir que esperaba un gesto de dignidad y no un discurso burocrático.

Hay exceso de realpolitik en el gobierno frente a los Estados Unidos (EU). Los internacionalistas de la realpolitik -dominantes en los gobiernos del PRI y el PAN- son responsables de la actual debacle en la defensa de los intereses de los mexicanos, por su falta de nacionalismo, de vergüenza, de amor a México y sus sagrados intereses. Muchos de esos internacionalistas hicieron sus posgrados en universidades norteamericanas.

El Muro: Escenarios

La construcción del muro fronterizo no solo es una agresión a México, su cultura, su gente, sus trabajadores. Es una agresión a Centroamérica, al Caribe, a los países andinos, al Brasil, al cono sur.

Viola principios constitutivos de la carta fundacional de la OEA, basados en la cooperación y entendimiento mutuo. Viola el Plan Mérida, el Plan Colombia y los acuerdos de seguridad regional.Pero sobre todo, viola los Derechos Humanos y el TLCAN (a punto de caerse).

El Unasur, el Celac, el Alba, el Caricom deben coordinarse para enfrentar el muro. No solo es un tema mexicano. Ni en la época del Apartheid sudafricano, se construyeron muros para segregar a los sudafricanos negros.

Y no nos engañemos, no solo es Trump como personaje racista y misógino el que empuja esta iniciativa. Bill Clinton comenzó la construcción del muro, Bush lo prolongó hasta la mitad y Trump quiere terminar de cerrarlo e incluso construir una tercera o segunda valla fronteriza. Obama se encargó de las expulsiones masivas de mexicanos.

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Las élites que controlan la economía y la política de los EU han explotado y neocolonizado a México con sus bancos y multinacionales, en alianza con sus lacayos e ideólogos internos. Su última conquista: Privatizar los recursos energéticos con los cuales México se modernizó en el siglo XX.

Se debe tener claro, que hay una nueva alianza del poder racista y xenófoba en los EU, que está recuperando hegemónicamente la identidad blanca, sajona y protestante. No solo es Trump. Hay que observar su gabinete y la alineación de fuerzas en el Partido Republicano.

Se viene el gran negocio del Plan de Infraestructuras. Eso hará crecer la economía, dará empleo y sin inmigrantes subirán los salarios. El Trumpismo tiene asegurada la reelección, y antes es muy probable que le retire el voto a millones de inmigrantes, ante la impotencia de los demócratas.

Los centroamericanos y caribeños que no logren pasar el muro terminarán quedándose en México. Comenzarán disputas y conflictos en las ciudades, aunque en el campo, posiblemente sean explotados por rancheros y finqueros como ocurre en Chiapas con los Guatemaltecos. Ello introducirá tensiones en la relación de México con América Latina.

Los mexicanos que sean expulsados de EU, no encontrarán trabajo en México, con los salarios que tuvieron antes. Será pura sobrevivencia y probablemente terminen en la informalidad o ilegalidad. Los jóvenes salvadoreños que fueron expulsados de Los Angeles en los años ochenta son los que organizaron las pandillas en El Salvador, Honduras y Guatemala. Aumentará la inseguridad ciudadana.

Mientras los desorientados neoliberales ofrecen nuevos TLC “con otros países” como alternativa, (no dicen que para que den resultados se requieren años de formacion de cadenas y sinergias), se seguirá devaluando el peso frente al dólar para sostener a los exportadores, pero reventarán a la clase media, PYMES y trabajadores. De facto los precios de alquileres, tarjetas bancarias, préstamos, bienes importados aumentarán.

Habrá una insolvencia generalizada, más aún si se tocan las remesas de los inmigrantes. El turismo solo ayudará a los estados con buenas playas. Aumentarán los préstamos informales manejada por el crimen organizado, al estilo siciliano.

Hay que evitar estos escenarios cambiando de rumbo económico y cancelando a esta envejecida y corrupta clase política. Y necesitamos una política exterior que reactive a los BRICS y reinserte sin complejos ni arrogancias a México en América Latina.