Durante su primera visita a Puerto Rico tras el paso del huracán María, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se mostró insensible y desconsiderado.
Pese a ser testigo de la devastación que causó María, el mandatario se limitó a visitar algunos lugares, dar polémicas declaraciones y arrojar víveres a los damnificados.
A través de la red circula un video donde se observa al magnate lazar rollos de papel a los puertorriqueños, mientras ellos tratan de alcanzarlos.
Tarde, pero… ¿seguro?
Trump visitó la zona de desastre casi tres semanas después del paso de María, a diferencia de lo sucedido en Houston, ciudad a la que se acercó apenas un par de días después del paso de Harvey.
Además, durante sus discursos en Puerto Rico, el presidente estadounidense minimizó la tragedia, haciendo referencia al “bajo número de víctimas” y a que no se trató de “una catástrofe real”.
“Si miras a una catástrofe real como el Katrina (…), cientos y cientos y cientos de personas que murieron, y miras lo que ha pasado aquí, con una tormenta que realmente fue abrumadora”, declaró.
Durante su visita a la isla, que duró apenas unas horas, se acercó al municipio de Guaynabo, próximo a San Juan, que fue uno de los más afectados por la tormenta.
De acuerdo con medios locales, Donald Trump también ‘culpó’ a Puerto Rico por ‘gastar’ una parte importante del presupuesto.
“Odio decíroslo, Puerto Rico, pero están haciendo que se vea desfasado nuestro presupuesto. Gastamos un montón de dinero en Puerto Rico y eso está bien, hemos salvado muchas vidas”, afirmó.
A lo que el lider demócrata en el Senado, Chuck Schumer, respondió pidiendo que “pare de culpar a Puerto Rico”, y que se arremangue la camisa “para encauzar las labores de recuperación”, tal y como es su obligación.
